1. La Casetina
La Casetina
En la sierra de Santa Catalina, por encima de la localidad de Serradilla, podemos visitar uno de los lugares más especiales y menos conocidos de la Reserva de la Biosfera de Monfragüe: la Casetina.
Sobre un cancho (una gran roca de granito) se levanta una diminuta capilla con una gran cruz de madera conocida por los lugareños como la Casetina. Su construcción se atribuye a San Pedro de Alcántara, que en el siglo XVI recorrió estas tierras y habitó el cercano monasterio de El Palancar.
Durante siglos, a este lugar han venido fieles a rezar que han dejado pequeñas cruces de madera como símbolo de sus plegarias y peticiones. También ha sido punto de vigía desde donde los serradillanos avisaban de la cercanía de peligros tocando la caracola. Sea por lo que fuere, la Casetina es un lugar especial con unas vistas privilegiadas de la Reserva que merece una visita.
Motivos para descubrirlo
No tan famoso como el mirador del lobo pero mucho más especial, la subida a la Casetina es una ruta bastante desconocida que seguro que disfrutarás. Además, el pequeño habitáculo con su enorme cruz le confieren un halo de recogimiento y conexión con la naturaleza.
¿Cuándo?
En cualquier época del año, las vistas desde este mirador te sobrecogerán.
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